No te unas en yugo desigual

 
 
   

La Palabra de Dios es clara, y siempre tiene un propósito de bendición para nuestra vida cuando la obedecemos.

Cuando leemos este pasaje:

No estéis unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?
2 Corintios 6:14

Tenemos dos opciones: obedecerlo para bendición o desobedecerlo y recibir las consecuencias a la desobediencia.

Es fácil entender porque El Señor nos manda NO unirnos en yugo desigual, tarde que temprano seremos contaminados por esas creencias diferentes a lo que Dios dice.

Te convencerán de vivir en «amor libre» a lo cual Dios le llama fornicación o adulterio. Te incitarán a «saborear» los placeres de esta vida: borrachera y drogas.
Te harán dudar y te dirán: «Dios no ha dicho eso, El quiere que seamos felices», te incitarán a comer del árbol del conocimiento del bien y del mal: en dónde ya no importa lo que Dios diga, sino lo que tu pienses… llevándote a la muerte espiritual.

¿Por qué le dijo Dios a Salomón (uno de los hombres más sabios) que no se uniera con mujeres extranjeras (no creyentes)?
Exactamente, porque harían que él apartara su corazón del Señor  y se volvería a otros ídolos (las mismas mujeres y el sexo); pondrían a la criatura antes que al creador, con las consecuencias que podemos leer en Romanos 1.
Salomón decidió desobedecer a Dios y unirse primero con una mujer extranjera… pero no se detuvo ahí…  y por esa mala decisión, Salomón perdió el favor del Señor y el Pueblo se dividió en dos reinos.

Lee la Historia completa de las consecuencias de su desobediencia en:
1 Reyes 11

Dios nos creo con libre albedrío, y eso quiere decir que podemos decidir vivir como nos plazca. Pero también nos advierte las consecuencias de los caminos que queramos seguir: por un lado: Su Camino en obediencia y por el otro: Nuestro camino en rebeldía.  Ambos con dos destinos muy diferentes: el de la vida y el de la muerte.

15 Mira, yo he puesto hoy delante de ti la vida y el bien, la muerte y el mal;16 pues te ordeno hoy amar al Señor tu Dios, andar en sus caminos y guardar sus mandamientos, sus estatutos y sus decretos, para que vivas y te multipliques, a fin de que el Señor tu Dios te bendiga en la tierra que vas a entrar para poseerla.
17 Pero si tu corazón se desvía y no escuchas, sino que te dejas arrastrar y te postras ante otros dioses y los sirves, 18 yo os declaro hoy que ciertamente pereceréis. No prolongaréis vuestros días en la tierra adonde tú vas, cruzando el Jordán para entrar en ella y poseerla. 19 Al cielo y a la tierra pongo hoy como testigos contra vosotros de que he puesto ante ti la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida para que vivas, tú y tu descendencia.

Deuteronomio 30:15-19

La recomendación de Dios es que decidas amar a tu Dios, andar en Sus Caminos y guardar Sus mandamientos, para que te vaya bien y bendiga a tu familia y descendencia… pero es tu decisión.

«Padre, sabemos que Tu Pueblo perece por: falta de conocimiento o por rebeldía. Tu conoces el corazón de cada persona que está leyendo este mensaje, y solo Tu puedes traer el don de arrepentimiento para que se vuelvan de sus malos caminos y deseen buscar tu rostro. Padre, Tu eres el que pones el querer como el hacer… y oramos para que esta Palabra caiga en tierra fértil y de mucho fruto; y que la vida de las personas que buscan leer Tu Palabra, puedan ser transformadas por el poder de Tu Espíritu Santo y reciban bendición en su vida y en su futura descendencia. Te lo pedimos en el nombre de Jesús y te damos gracias porque Él derramó Su Sangre para pagar por nuestro pecado y cuando venimos con un corazón sincero y arrepentido, Tu nos perdonas.»

Por tu Encuentro con Jesús,
-Ani Garza T

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